
Tras la reciente aprobación por el Gobierno del Plan de Intensificación del Ahorro y Eficiencia Energética, más conocido como el Plan de los 110 km/hora, actualmente existen en nuestro país varios planes de ahorro y eficiencia energética en vigor a nivel estatal, a los que hay que añadir los planes autonómicos y locales.
Esto hace cada vez más complicado para las empresas diferenciar entre unos planes y otros, saber qué tipo de medidas fomentan y a qué sectores de actividad se dirigen.
El Plan recientemente aprobado por Consejo de Ministros recoge 20 medidas en tres grandes ámbitos: transporte y movilidad, edificación e iluminación y consumo eléctrico, además de incluir una campaña de concienciación ciudadana.
Dotado con más de 1.100 millones de euros, el Plan ofrece oportunidades para las empresas en sectores tan dispares como proyectos a nivel local incluidos en los Planes de Movilidad Urbana Sostenibles, un Plan Renove de neumáticos, el fomento de la biomasa para usos térmicos o el establecimiento de una línea ICO específica para Empresas de Servicios Energéticos (ESE).
Además, este Plan anuncia un nuevo Plan, esta vez enfocado en el transporte de mercancías y con especial atención al transporte ferroviario.
Sin embargo, es importante no confundir dicho Plan, aprobado en Consejo de Ministros este mes de Marzo, con el Plan de Activación del Ahorro y la Eficiencia Energética 2008-2011, todavía en vigor, que el Gobierno puso en marcha hace ya tres años con 31 medidas. Estas medidas se articulaban en torno a 4 líneas de actuación: movilidad, edificios, ahorro eléctrico y una última línea transversal. Entre las medidas destacaban el impulso a las empresas de servicios energéticos, el objetivo de un millón de coches eléctricos e híbridos para 2014, la financiación de inversiones que promuevan el ahorro energético en infraestructuras turísticas y la introducción de las bombillas de bajo consumo.
En cualquier caso, el Plan que ofrece más oportunidades para las empresas sigue siendo el Plan de Acción 2008-2012 de la Estrategia de Ahorro y Eficiencia Energética en España (E4). Este tercer Plan plurianual se articula a través de distintas medidas de actuación agrupadas en siete sectores: Industria, Transporte, Edificación, Servicios Públicos, Equipamiento residencial y ofimático, Agricultura y Transformación de la Energía.
Este Plan, más conocido como el Plan E4, es implementado a través de convenios plurianuales de carácter bilateral entre el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE) y las Comunidades Autónomas.
Las líneas de financiación y ayudas a los consumidores y empresas del E4 son a la postre las de mayor interés para las empresas que desarrollan productos o proporcionan servicios en el campo del ahorro y la eficiencia energética.
Si se quiere aprovechar al máximo sus líneas de financiación es importante seguir muy de cerca la publicación de las Órdenes de Ayudas de las 17 Comunidades Autónomas, que habilitan los plazos de solicitud y gestión de las mismas. Además, el traslado a los Entes Regionales de la Energía de las distintas CC.AA. de las propuestas empresariales y sectoriales son fundamentales para influir en la fijación de las prioridades y presupuestos de cada una de las líneas de actuación del Plan en cada región. Por ello, un trabajo constante de relaciones institucionales con estos Entes Regionales permite a las empresas aprovechar oportunidades en este ámbito.
Aunque la enumeración de los Planes de Ahorro y Eficiencia Energética podría seguir con otros de carácter más sectorial (como el de Edificios Públicos), de este breve análisis se desprende la necesidad para las empresas de seguir muy de cerca todos estos Planes y entender su funcionamiento, prioridades, presupuestos, plazos y reparto competencial en su implementación. Todo ello, y especialmente una relación institucional constante con los responsables de la definición e implementación de estos Planes a nivel estatal, autonómico y local, facilitará el máximo aprovechamiento de los mismos por las empresas que quieren participar como oferentes de los servicios subvencionados o como beneficiarios de las ayudas ofrecidas.